Siempre que la Belleza mira, el Amor también está allí; siempre que la belleza muestre una mejilla sonrosada el Amor enciende su fuego con esa llama. Cuando la belleza mora en los oscuros vallecitos de la noche el Amor viene y encuentra un corazón enredado en los cabellos. La Belleza y el Amor son cuerpo y alma. La Belleza es la mina, el Amor, el diamante. Juntos han estado desde el principio de los tiempos, lado a lado, paso a paso.
Jelaluddin Rumí