Todo es un culto

Abandonando toda idea de resultado,
impertérrito, confiado en sí mismo,
[el sabio] no actúa en absoluto,
incluso cuando está plenamente inmerso en la acción.
No espera nada,
no teme nada.
Sereno y libre de toda posesión,
impoluto,
actuando sólo con el cuerpo,
contentándose con lo que sucede,
desapegado del placer y del dolor,
del éxito o del fracaso,
actúa sin ligarse nunca a sus acciones.
Cuando un hombre se ha liberado de los apegos,
cuando su mente se ha enraizado en la sabiduría,
todo lo que hace es un culto
y todas sus acciones se disuelven.
Bhagavad Gita