La meditación del stop

La otra mañana me descubrí dándole prisa a la tostadora. Después de unos momentos de mirar por su abertura, de hurgar en ella tratando impacientemente, de que mi rebanada se tostara más rápidamente, desperté. Me reí, respiré y sonreí, asentada en el momento presente. Mi tostadora hizo su trabajo y produjo una perfecta tostada en menos de tres minutos. Decidí crear una "práctica del stop"a partir de aquella experiencia de la tostada de pan.
La práctica es simple. El colocar el pan en la tostadora es mi recordatorio, una señal de stop visual y táctil. Durante los tres minutos en que la tostada se está dorando, respiro, calmando mi actividad mental y física. Esperar la tostada es, para mí, una oportunidad para experimentar la paz.
Las calles y autopistas de los Estados Unidos utilizan un símbolo para el stop: una señal octogonal roja con letras blancas donde pone: "STOP". En la educación vial, aprendemos que cuando vamos en coche y vemos esa señal hemos de detenernos por completo. Se nos enseña a mantener una plena atención mirando a nuestra derecha, a nuestra izquierda, al paso de cebra y por el retrovisor antes de proseguir. Eso es una práctica de plena atención, la práctica del detenerse ...
Tracy D. Sarriugarte & Peggy Rose Ward