¿Qué creéis que hay en mayor cantidad, el puñado de hojas de simsapa que he reunido en mi mano o todas las que hay en el bosque?
Una bagatela son las hojas que tiene el Buda en su mano en comparación con las que hay en el bosque, dicen los discípulos.
Pues de la misma manera, agrega Buda, son muchas las cosas que he comprendido plenamente pero no os he revelado; y son pocas las cosas que os he confiado. ¿Por qué no os las he confiado? Porque, ciertamente, no son útiles, no son esenciales para la vida pura, no conducen al desapego, al desapasionamiento, a la cesación, a la tranquilidad, a la comprensión total, a la iluminación, al Nirvana, por eso no las proclamo.
Soy una alumna más que aprende de sus enseñanzas, ciertamente sencillas pero desconcertantes casi siempre
ResponderEliminarGracias Sina, me adentro un momento en tu casa y salgo llena de bendiciones
dulces sueños para tí
Ciertamente, hay cosas fútiles e inecesarias para llegar a la esencia de la vida. liberarse de ellas es complejo en una sociedad capitalista como la nuestra. Un Abrazo Enorme e infinitas gracias por tu entrada.
ResponderEliminarAmigo Buda, ¿has contado con la insaciable curiosidad del ego? A ver si vamos a tener que tirarte de la lengua jejeje ;-)
ResponderEliminar¡Saludos!
Hola Sina:
ResponderEliminarLos grandes maestros siempre nos asombran con sus enseñanzas, la misma perplejidad que nos producen sus palabras es la que nos lleva al despertar.
Cariños.
No necesitamos más de lo que tenemos. Tenemos más de lo que creemos. Sabía enseñanza de Buda.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo silencioso impregnado con aroma a jazmín,
Te amo Sina,
Naia
Gracias a ti Arianna, por tu luz.
ResponderEliminarUn abrazo lleno de cariño.
Seguimos desprendiéndonos, despacito, pero conscientemente.
Gracias a ti Caperucita.
Un abrazo muy luminoso.
Uy! Toni, dejaré que sea Buda quien te responda ... ;)
Yo solo te mando un abrazo lleno de cariño.
Asi, es, querida Delia, hay veces que solo con el asombro dejamos pausas en nuestra mente.
ResponderEliminarUn abrazo y una caricia para ti, bella.
Querida Naia, solo con saber valorar cada minuto intensamente, agradeciendo ... No hay más ...
Un abrazo, bella amiga.
Que seas muy feliz.
Yo también te amo.
Tal vez con unas pocas enseñanzas, bien llevadas a la práctica, es suficiente.
ResponderEliminarUn beso
Qué relato tan esclarecedor. Lo que importa es el despojo total de cualquier afán, de cualquier búsqueda de poder personal. Una vez que se vive en ese paraje espiritual, lo que suceda será tan sólo un adorno. Gracias Sina por compartir este cuento. Un beso para ti, amiga.
ResponderEliminarSeguro que es así, Angelina. A veces el saber
ResponderEliminardemasiado nos aleja de la verdad.
Un beso.
Ya ves Furia, siempre andamos buscando conocimientos y no nos hacen falta.
Para qué?
Un abrazo lleno de luz, amiga
Tal vez saber mucho confunda, o el que es muy sabio conoce el proceso de aprendizaje y qué vale enseñar, y qué otras cosas se aprenderán luego, o vendrán solitas...
ResponderEliminarLas cosas no tan útiles que sabía Buda, de algún modo le servirían, pero estaba en un nivel muy elevado como para pasar por encima y no por debajo de ellas.
Siempre aprendo aquí, siempre me voy pensando. Gracias.
Un abracito, Sina, que tengas muy hermoso fin de semana.
Pues me alegro mucho de que puedas aprender cosas en este humilde lugar.
ResponderEliminarFeliz fin de semana.
Un abrazo muy luminoso, bella Marina
Con un puñado de enseñanzas comprendidas podemos hacer mucho, la información nos va llegando a medida que estamos preparados, nos lleva mucho tiempo comprender las esenciales para la vida, quizás por lo simple que son.
ResponderEliminarGracias por tu ayudita de siempre.
Besos:)
Gracias a ti Angeles, por tu aporte.
ResponderEliminarUn abrazo.