En una ocasión un discípulo le preguntó a su maestro cómo podría evitar el preguntarse si se hallaba en el camino de la sabiduría o no, y el maestro le repuso: "No te preocupes, que cuando comiences a divisar la meta, ya no tendrás necesidad de preguntarte nada". Las dudas acontecen sobre todo al comenzar a recorrer la senda o incluso, y mucho más aún, antes de dar el primer paso sobre la misma. Lo importante es ponerse a caminar y no extraviarse con inútiles e improcedentes preguntas, ni preocuparse en lugar de ocuparse, ni obsesionarse por el objetivo en lugar de ir viviendo cada instante y paso del camino. Requerimos todas las energías para recorrerlo, así que no tiene objeto complicarse aún más con preguntas irrelevantes.
Extraído del libro, Los mejores aforismos y parábolas de Oriente
de Ramiro Calle
Todos los caminos son difíciles, pero lo son mucho más sin en vez de disfrutar lo que vivimos, nos atormenta si lo haremos bien o que haremos a continuación.
ResponderEliminarAbrazos
Mucho contenido en esta parábola que concreta verdades tan basicas como grandiosas.
ResponderEliminarbesos y abrazos cargados de luz.
POr cierto, cuales son esas flores por las que has cambiado tu jazmín? (pensamientos?).
Es la actitud que tomemos ante el camino.
ResponderEliminarUn abrazo, J. Carlos.
Es que hay veces que tenemos que recordar y para eso estamos, no?
ResponderEliminarUn abrazo lleno de luz para ti, Hoka hey
Son amapolas de California, te gustan?
El rio se renueva a cada momento , fluye sin hacer nada más
ResponderEliminarFelices sueños Sina, cariños para tí
No se veía bien en la foto. ES guapa la flor y al parecer tiene bastantes propiedades medicinales (haciendo honor a la verdad, me acabo de enterar). Ya te tenía asociada con el jazmín (planta que me encanta), pero nada, ahora serás "mi amiga amapola de California", todo se renueva siempre.
ResponderEliminarUn beso compañera floreada.
Buenas noches querida Sina.
ResponderEliminarEl camino del peregrino se ve claro en momentos ...es el simple caminar por el sendero de la vida misma , vivir lo que acontece, a veces es claro...
Hay momentos en que uno pierde las flechas de indicación y se confunde...pero no importa porque la semilla ya dió su fruto y pronto la conciencia le vuelve a indicar el sendero.
Un abrazo amiga.
Ramas de lirio
aferradas a mis pies
!cordones para mis sandalias!
Ojalá fuesemos capàz de vivir así, ocupándonos sin preocuparnos y aprendiendo a vivir cada instante sin preocuparnos de llegar a la meta.
ResponderEliminarAaaiiiss en ello estoy, a ver si lo consigo.
Besitos
Lo importante es ponernos en camino. Qué buena parábola, Sina. Vivir sin preocuparse de vivir es una buena máxima. Un beso grande para ti.
ResponderEliminarHoka hey, la verdad es que no sabía que tenía propiedades medicinales. La encontré por la red y me sedujo el color, ahora me atrae el color naranja. De todos modos el jazmin sigue siendo para mi la flor más pura y posiblemente la siga utilizando.
ResponderEliminarComo tu dices, todo se renueva ... como la vida ;)
Un beso.
Gracias por tus regalos, Peregrina.
ResponderEliminarRealmente bello el haiku.
Hay veces que ni sabes donde estás, jajjajaja,
pero siempre estás en el camino. Solo son etapas.
Un abrazo para ti, bella.
Sí, si, estar ya en el camino y saber disfrutarlo.
ResponderEliminarEs lo más emocionante que puede ocurrirnos!
Un abrazo, (de nuevo) hoy ya te he mandado tres!!!
este muy amoroso.
Arianna y nosotros somos esa agua que va por el rio ... siempre cambiantes...
ResponderEliminarEstaba con las amapolas y se me fue el santo al cielo.
Gracias, querida amiga, por estar siempre aquí.
Un gran y amoroso abrazo.
Buen dia, para Todos
ResponderEliminar