Correctamente entendidos y utilizados, los obstáculos y dificultades a menudo pueden resultar una fuente inesperada de energías.
Gesar fue un gran rey guerrero del Tibet, cuyas hazañas constituyen la mayor epopeya de la literatura tibetana. Gesar significa "indomable", una persona a la que nunca se puede abatir. Desde el momento en que nació, su malvado tío Trotung trató de eliminarlo por todos los medios, pero a cada nuevo intento Gesar se volvía más y más fuerte.
Para los tibetanos, Gesar no sólo es un guerrero en el plano de las armas, sino también en el espiritual. Un guerrero espiritual es alguien que ha desarrollado una clase especial de coraje, alguien de por sí inteligente, apacible e intrépido. Naturalmente, los guerreros espirituales también pueden tener miedo, pero aun así son lo bastante valerosos para saborear el sufrimiento, para relacionarse claramente con su miedo fundamental y extraer sin evadirse las lecciones de las dificultades.
Sogyal Rimpoché